Científicos australianos han desarrollado una píldora 'anticonceptiva' que impide el transporte de espermatozoides pero permite su reproducción.Se toman diariamente, por lo que parece, y su comercialización se producirá dentro de unos 10 años.
Si el hombre quiere volver a tener hijos tras haber tomado estas píldoras, puede dejar de tomarlas para ello. El científico jefe dice que no tienen por qué producirse efectos secundarios a largo plazo.
Sus creadores son unos científicos de la Universidad de Melbourne, en Australia y sus experimentos fueron llevados a cabo con ratones genéticamente modificados.
Lo que realmente hacen estas píldoras es bloquear dos proteínas esenciales para hacer que los espermatozoides se desplacen por los conductos deferentes, por lo que se impide que el semen contenga espermatozoides en la eyaculación.
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