Esta nueva
técnica consiste en acceder a los cálculos introduciendo un endoscopio, desde
la zona lumbar, a través de una punción en la piel. Este aparato permite la
localización de la litiasis y la aplicación de ondas de choque, ultrasonidos o
láser para eliminar los cálculos. Este método es conocido como nefrolitotomía
percutánea, y ya ha sido intervenida en varios pacientes.
El
servicio de Urología del Hospital General Universitario de Ciudad Real, ubicado
en Castilla-La Mancha y dependiente de su servicio de salud, ha incorporado
esta novedosa técnica de la que ya se han beneficiado varios pacientes.
La
litiasis o aparición de cálculos en el sistema excretor urinario es un problema
muy común ya que está bastante relacionado con los hábitos alimenticios de los
pacientes, la baja ingesta de líquidos y el sedentarismo, es decir el modo de
vida de las personas que apenas hacen ejercicio físico. Por lo que el
profesional sanitario de este hospital manchego subraya que la introducción de
hábitos saludables en el estilo de vida de las personas intervenidas es
fundamental "para evitar una reaparición de la litiasis que se puede
producir en la mitad de los pacientes a los cinco años".
Uno de cada
tres pacientes con litiasis urinaria tiene antecedentes familiares y más de la
mitad de los cálculos renales tienen una procedencia genética y se asocian a
alteraciones del metabolismo de los niveles de calcio, fósforo o ácido úrico.
Esta
enfermedad se inicia a partir de cristales de diferente composición que se forman
en el riñón y no se eliminan por la vía urinaria, por lo que aumentan de tamaño
al añadirse más cristales. Estos cristales también son conocidos como piedras.
Quienes
sufren esta enfermedad padecen dolor en la zona lumbar que puede irradiar hacia
el cuadrante inferior del abdomen y algunas veces, a los genitales, cuadro
denominado cólico nefrítico. Es posible que aparezcan ciertas molestias al
miccionar y que la orina tome un color vino tinto por la presencia de sangre.
La fiebre precedida del dolor lumbar puede ser un signo de complicación, ya que
puede desarrollar una enfermedad grave (sepsis) y requerir la desobstrucción
urgente de la vía urinaria.
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