EL TRASPLANTE DE CÉLULAS MADRES, PODRÍA ERRADICAR EL VIH




Una de las principales habilidades del VIH es su capacidad de ocultarse, de refugiarse en escondrijos donde permanece latente. Es por esto que los seropositivos deben tomar los tratamientos antirretrovirales de por vida ya que, si los dejan, el virus podría volver.

En su búsqueda de una cura contra la infección, los científicos llevan tiempo analizando el papel de los trasplantes con células madre. Esta estrategia se propulsó después de que en 2008, Timothy Brown, más conocido como el 'paciente Berlín' , lograra superar la enfermedad tras someterse a un trasplante de médula para tratar la leucemia que también padecía. El estudio de la evolución de los pacientes debe ser a medio-largo plazo, ya que se han dado casos de rebote viral tras muchos meses en los que la infección parecía erradicada, añade.
El hallazgo, señalan los investigadores, "podrían servir para el diseño de estrategias de curación del VIH menos invasivas". Actualmente, el trasplante de células madre se recomienda exclusivamente para tratar enfermedades hematológicas graves.

Para llevar a cabo la investigación, los científicos analizaron a una cohorte de personas infectadas por el VIH que se habían sometido a un trasplante para tratar distintas enfermedades hematológicas que padecían.


Otra clave es la enfermedad de injerto contra huésped, un efecto habitual tras los trasplantes que se produce cuando las células del donante atacan a las del receptor y que también contribuye a la eliminación de los tumores provocados por las enfermedades hematológicas.Todos los pacientes que lograron que el virus no se detectara en los reservorios habituales padecieron la reacción, aunque pudo controlarse antes de que generara complicaciones importantes. "Esto sugiere que si logramos controlar este efecto para que no sea fatal puede contribuir a destruir las células como las del reservorio viral", señala Díez.
Resultado de imagen de foto del virus del vih

El objetivo del equipo era comprobar si aparte de la mutación asociada a la curación del 'paciente Berlín' -denominada CCR5 Delta 32-, otros mecanismos asociados con el trasplante también podría influir en la erradicación del VIH. De los seis pacientes estudiados, el único que sí conservó un reservorio de VIH detectable fue el que había recibido un trasplante de sangre de cordón umbilical (el resto fueron de médula ósea), que, por las características del trasplante, tardó más tiempo en conseguir que las células del donante reemplazaran en su organismo a las suyas propias. "Hemos visto que, cuanto más corto es ese plazo, más efectiva es la reducción del reservorio".

Los pacientes que han llegado hasta estos tratamientos han recorrido un largo y peligroso camino. Han tenido un cáncer hematológico y; han recibido un transplante más un acondicionamiento con quimio o radioterapia, todo ello con un riesgo de mortalidad muy elevado. De hecho, los pacientes incluidos en el estudio; habían tenido la suerte de sobrevivir más de dos años. Finalmente y aunque parezca paradójico, lo más beneficioso para controlar la infección por VIH es que se produzca un rechazo.

No obstante, a pesar de lo preliminar que resulta, el secretario de GeSIDA sí reconoce el valor científico de la investigación. "Lo que sí puede aportar son nuevos conocimientos sobre los mecanismos en estos pacientes que tienen que ver con el control viral, y ver si esos mecanismos se pueden aislar y usar sin tener que padecer todo lo malo del proceso", afirma.



Fuente: El Mundo

Comentarios