Se trata de una estructura de células similar a una malla dentro de la piel que es sensible al daño mecánico doloroso como los pinchazos y la presión. Este nuevo órgano sensorial fue descubierto por un grupo de investigadores del Instituto Karolinska, en Suecia, y sus hallazgos ya han sido publicados en la famosa revista Science. Este descubrimiento desmiente la teoría de que el proceso se llevaba a cabo por unas células denominadas nociceptores.
Este órgano recientemente descubierto esta formado por un conjunto de células gliales con una gran cantidad de largas protuberancias que juntas forman este órgano similar a una malla. Estas células gliales forman parte del sistema nervioso y complementan a las neuronas, dándoles soporte y percibiendo diversos cambios que se producen en el ambiente.
Las células que componen este órgano son bastante sensibles a los estímulos mecánicos, lo que explica el porque realizan la función de detectar pinchazos o presión. Los científicos también descubrieron que al bloquear el órgano y sus capacidades, había una disminución de la capacidad de sentir dolor.
Este estudio demuestra que la sensibilidad al dolor no se produce solo en las numerosas fibras nerviosas de la piel, sino también en este órgano sensible al dolor que ha sido descubierto hace tan poco. Este hallazgo cambia la comprensión humana sobre los mecanismos celulares de la sensación física y puede ser de gran importancia en la comprensión del dolor crónico.
Hasta hace poco se había pensado que el dolor se producía exclusivamente por la activación de terminaciones nerviosas en la piel. Este descubrimiento demuestra lo contrario e indica una forma completamente nueva comprender los estímulos externos y el dolor, lo que podría tener un gran desarrollo de nuevos analgésicos que pueden mejorar la vida de muchas personas y traer muchos avances a la medicina.
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